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VolverDía Mundial Sin Tabaco: cómo dejar de fumar
El 31 de mayo se celebra el Día Mundial sin Tabaco, que tiene como objetivo informar a la población sobre los riesgos del consumo de tabaco y fomentar prácticas que desaceleren el mismo. Desde nuestro Hospital nos sumamos a la concientización y acercamos la información que nos brindan profesionales del servicio de Neumonología.
El tabaquismo es una enfermedad producida directamente por el cigarrillo y que se genera por la acción de la nicotina en el cerebro. Trae aparejados numerosos riesgos para la salud, por lo que reducir su consumo representa una drástica mejora en muchos aspectos: ayuda a vivir más tiempo, reduce el riesgo de padecer cáncer, osteoporosis, enfermedad cardíaca, enfermedad pulmonar, insuficiencia renal, problemas estomacales y diabetes.
La Doctora María Eugenia Olmos, miembro del servicio de Neumonología, nos cuenta que “dejar de fumar no es fácil para la mayoría de las personas, y hasta puede tomar varios intentos, pero la ayuda y el apoyo están disponibles”. “Es posible que las personas dejen de fumar por su cuenta, pero obtener ayuda aumenta las posibilidades”, agrega.
Es conveniente comenzar hablando con tu médico/a y armar un plan para:
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Establecer una fecha para dejar de fumar.
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Decirle a tu familia y amigos que planeas dejar de fumar.
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Planificar con anticipación las dificultades que se presentarán, como los antojos de cigarrillos.
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Retirar los cigarrillos de tu hogar, lugar de trabajo, automóvil u otro lugar donde estén a mano.
Al comienzo pueden aparecer síntomas de abstinencia como:
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Problemas para dormir.
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Sentirse irritable, ansioso o inquieto.
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Sentirse frustrado o enojado.
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Problemas para pensar con claridad.
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En algunos casos, depresión, que requiere tratamiento.
Si bien estos síntomas pueden ser difíciles de manejar, el uso de medicamentos puede ayudar.
¿Qué tratamientos ayudan a dejar de fumar?
Existen algunos tratamientos que pueden emplearse al intentar dejar el cigarrillo:
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Terapia de reemplazo de nicotina: se trata de medicamentos que reducen las ansias de la nicotina, la droga principal en los cigarrillos y la causa de que sean adictivos. Algunos de ellos son parches para la piel, chicles, pastillas, aerosoles nasales e inhaladores. A menudo ayuda combinar dos formas de reemplazo de nicotina.
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Tratamiento con fármacos: existen medicamentos recetados que ayudan a tratar los síntomas de abstinencia y a reducir las ansias de fumar. Estos pueden combinarse con el reemplazo de nicotina de acuerdo lo recomendado por el médico.
Preguntas frecuentes
¿Qué pasa si ya he fumado durante mucho tiempo?
Cuanto más tiempo hayas fumado, mayores serán las posibilidades de haber desarrollado problemas de salud. Aun así, nunca es demasiado tarde para dejar de fumar, y esto ayudará a tu salud aun si eres mayor o has fumado durante muchos años. Lo mejor que se puede hacer para reducir la posibilidad de tener un problema de salud causado por fumar es dejar de hacerlo.
¿Se gana peso al dejar de fumar?
Es posible que ganes algunos kilos, lo cual puede ser frustrante para algunas personas, pero es importante recordar que estás mejorando tu salud al dejar de fumar. Se puede evitar subir mucho de peso manteniéndose activo y comiendo una dieta saludable.
¿Qué pasa si no puedo dejar de fumar?
Si no dejas de fumar al primer intento, o si el hábito regresa tras haberlo dejado, no pierdas la esperanza. Muchas personas tienen que intentar más de una vez antes de poder dejar de fumar por completo.
Podría ser útil tratar de entender por qué dejar de fumar no funcionó y buscar algo que puedas hacer diferente cuando lo intentes de nuevo. Puede ser útil determinar qué situaciones le dan ganas de fumar para poder evitarlas.
¿Qué hábitos mejoran las posibilidades de dejar de fumar?
Algunos hábitos que mejoran las posiblidades de dejar de fumar son:
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Hacer ejercicio regularmente. Cualquier tipo de actividad física es buena para la salud, y además puede ayudar a reducir el estrés.
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Mantenerse alejado de las personas que fuman y de los lugares que generan ganas de fumar. Si las personas cercanas fuman, lo mejor es pedirles que eviten fumar en su presencia.
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Llevar chicle, caramelos duros o algo para llevarse a la boca. Estas cosas pueden reemplazar el cigarrillo cuando se sientan ganas de fumar.
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No rendirse, incluso si el hábito de fumar regresa. A la mayoría de la gente le toma algunos intentos antes de tener éxito.
¿Qué pasa con los cigarrillos electrónicos?
Muchas personas consultan por el uso de cigarrillos electrónicos, también denominado vapeo, y si este puede ayudar a dejar de fumar. Los médicos no recomiendan los cigarrillos electrónicos en lugar del uso de medicamentos y un correcto asesoramiento para dejar el hábito. Esto se debe a que los cigarrillos electrónicos todavía contienen nicotina y otras sustancias que son dañinas produciendo lesiones pulmonares asociadas al consumo de vapeo.
